Estos apuntes los saqué de un libro o de varios quizá, ya hace algunos años. Ahora los transcribo para el que le haga falta o como mera curiosidad.
Habrá alguna forma más para distinguir cuando un canario es macho o hembra, sobre todo en los de color. Lo que aquí se expone es una orientación, que se usa en los canarios de canto por no presentar características acentuadas en cuanto al color y dibujo de la pluma. Sin embargo, también valen para los de color, naturalmente.
• Cuando los pollos ya empiezan a partir el alpiste, los que son machos hacen una especie de cantinela, de gorgoriteo, mientras parece que están medio adormilados, a eso le llaman los criadores “repaso”.
• Los machos suelen tener los ojos más grandes y el conjunto de la cabeza también.
• Los machos suelen ser más grandes de cuerpo.
• Los machos suelen tener la cabeza algo achatada por arriba.
• Los pómulos en el nacimiento del pico, en los machos es más pronunciado que en las hembras.
• En dichos pómulos tienen unos pelillos o bigote, que en las hembras son más cortitos.
• Poniendo el pájaro en la mano, con el vientre hacia arriba, soplándole en dirección a la cloaca, los machos la tienen más sobresalientes (aunque esto cuando más se aprecia es cuando ya son adultos, sobre todo en la época del celo), y se les forma como un ganchito. Las plumitas de la cloaca forman como un plumerín. La cloaca de la hembra no presenta la misma forma que la del macho, pues el vientre y la cloaca siguen una misma línea suavemente curvada, pero nunca con ese “ganchito”, y las plumitas de la cloaca forman un abanico, en vez de plumero (abanico hacia atrás).
• Las plumas en el nacimiento de las alas y cola son de colores más vivos en los machos, así como también el plumoncito que tienen debajo del nacimiento de las alas y del pecho es mucho más vivo en los machos.
• Los machos tienen los movimientos más pausados. No salta de un lado a otro tanto como la hembra, sino para comer.
• La mirada del macho suele ser más franca, de frente. La de la hembra es como de reojo, reservada, como desconfiada.
• Los machos, para comer, por ejemplo la lechuga, la suelen sujetar con la pata. Esto no suele hacerlo la hembra.
• Al tirarse del saltador el macho cae de plano, el cuerpo aplomado. La hembra se tira de cabeza.
Todos estos detalles son exclusivamente orientativos, como antes se menciona, y lo único que va a disipar cualquier duda es el canto del macho, potente, continuado, diverso. No obstante hay algunas hembras que suelen hacer una especie de canto, pero no es tan variado, tan potente, suelen repetir estrofas y es pobre en repertorio.
ASMONTE
23.08.01
Beti dau zer ikasi dedio
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