SECCION DE NATACION DEL ALOÑA.25 URTE

La sección de natación del Aloña Mendi se viste mañana de fiesta. Este año cumple 25 años de vida, y ha decidido aprovechar la celebración de la Feria de la Cerveza que organiza el club, para montar una multitudinaria comida popular, a la que está prevista la asistencia de unas 120 personas.
No obstante, una de las citas más emotivas de la jornada será la competición que a lo largo de la mañana, de 10 a 12.00 horas reunirá a cerca de 80 de las viejas y actuales glorias del club en las piscinas del polideportivo, su habitat natural.
Y es que si hay algo que caracteriza a esta sección del Aloña es precisamente eso, la piscina. Su fundación está íntimamente ligada a la inauguración del polideportivo y las primeras piscinas municipales de Oñati. Un cuarto de siglo separa a los jóvenes nadadores que abren esta información y a los actuales, pero sus condiciones y rutinas apenas han cambiado. Las piscinas como todos aquellos que empezaron a competir en ellas son ya 25 años más viejas y, a juicio de la mayoría, necesitan una reforma en condiciones.
Quieren una piscina mayor
La sección de natación ha solicitado ya al Ayuntamiento la ampliación de 5 a 8 calles. Y es que en la actualidad, debido al trasiego que tiene está instalación, se ha quedado muy pequeña. Xabier Infante 'Artza', alma mater de la natación oñatiarra lo tiene claro, y como él la mayoría de los usuarios habituales de la piscina.
Para algunos no es la mejor solución, pero sí la más adecuada teniendo en cuenta la situación actual, ya que no supondría un gran desembolso económico. Simplemente habría que cavar tres calles más hacia la zona verde y meter una bañera más grande, ampliando claro está la cubierta.
El sueño de muchos oñatiarras de contar con una piscina exterior, parece poco factible, al menos en la actual ubicación. Y eso que hay quien todavía recuerda que en su día las Normas Subsidiarias reservaban los terrenos de las primeras casas de Bidebarrieta para la posible construcción de una piscina exterior, con área de solarium y de descanso. Pero una posterior revisión reconvirtió aquel terreno para equipamientos en suelo urbanizable, hipotecando el sueño de tener la piscina exterior que tantos anhelan en verano y que con la situación económica y de infraestructuras actual parece utópica.
La natación es un deporte muy sacrificado y en el caso oñatiarra más si cabe por las limitaciones del espacio. Hay que compaginar los entrenamientos con el uso habitual de las instalaciones, los cursillos, las ganas de jugar en el agua de los más jóvenes etc.. y cinco calles no dan para mucho, más si las comparamos con las 10 que dispone, por ejemplo, la interior de Bergara.
Pero reivindicaciones y carencias al margen, el club de natación ha demostrado todos estos años que sabe adaptarse a cualquier circunstancia, y gracias al empeño de su directiva y a la colaboración de padres, deportistas y ex-deportistas, tiene mucha vida.
El espíritu de sacrificio es una de sus virtudes. Y lo demuestran cada día yendo a nadar a las seis de la mañana, dando brazadas durante hora y media, y luego acudiendo a clase, volviendo en algunos casos a entrenar por las tardes. Pero la entrega y dedicación ha cundido, y el Aloña cuenta con infinidad de títulos de Gipuzkoa y Euskadi e incluso con medallas en campeonatos estatales.
El nadador local que más éxitos ha cosechado ha sido Unai Pedregal, que en los años 90 logró seis medallas estatales de plata y bronce, y que debido a un desafortunado accidente en bicicleta, no podrá estar mañana en la celebración de las Bodas de Plata. El fue uno de los 8 nadadores oñatiarras que participó en la primera competición oficial el 16 de enero de 1986. Junto a él se lanzaron al agua Iban Mugarza, Iñigo Seco, Olatz Alzelai, Gorka Esteve, Yolanda Muñoz y Ana Larrea. Ellos dieron las primeras brazadas de la sección de natación y hoy tienen unos 160 discípulos.
Otros de los nadadores que han dejado el pabellón oñatiarra bien alto son Ibon Alberdi, Unai Vázquez, Liher Ugarte, Amaia Andueza, Kepa Alberdi, Ane Saenz de Galdeano o Xabier Urbina, todos finalistas en Campeonatos España en distintas especialidades. Los dos últimos son el eslabón más cercano, el presente y futuro del Aloña, y Ane precisamente se encuentra preparando estos días el Campeonato de España en 50 y 100 metros libres que se disputará la semana que viene, y que de lograr alguna medalla pondría el broche de oro a las Bodas de Plata del Aloña.
D.V.