lunes, 1 de julio de 2013
San Mateo 8,18-22.
Jesús, al verse rodeado por la multitud, dio orden de cruzar a la otra orilla.
Entonces se le acercó un maestro de la Ley y le dijo: «Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.»
Jesús le contestó: «Los zorros tienen cuevas y las aves tienen nidos, pero el Hijo del Hombre ni siquiera tiene dónde recostar la cabeza.»
Otro de sus discípulos le dijo: «Señor, deja que me vaya y pueda primero enterrar a mi padre.»
Jesús le contestó: «Sígueme y deja que los muertos entierren a sus muertos.»
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario