Las fiestas dejan buen sabor de boca pese al éxodo vacacional

La alcaldesa Lourdes Idoiaga destacó ayer la participación de la gente. El espectáculo piromusical ha sido uno de los elementos más novedosos y aplaudidos


Tras el empacho festivo Oñati se va recuperando poco a poco del ciclón de los 'sanmigueles'. Tras la celebración del fin de fiesta el lunes, ayer fue el día de la gran resaca. Así todo aquel que pudo alargó sus horas de sueño o se echó una siesta aprovechando la jornada festiva designada por la mayoría de las empresas locales y todos los centros de enseñanza.
La mayor actividad se vivía en en recinto ferial, donde los barraqueros comenzaron a recoger sus atracciones. Los trabajadores del servicio de recogida de basuras también se emplearon a fondo para limpiar y desinfectar las calles más céntricas.
La alcaldesa Lourdes Idoiaga aprovechó el fin de fiestas para hacer un primer balance en el que destacó la elevada participación en los actos de la gente y la bonanza climatológica. La primera edil valoró en positivo «el éxito del espectáculo piromusical del domingo de Rosario y la gran labor de los grupos que salen disfrazados la Bixamon, así como la magnífica organización del Herri Eguna, el éxito de las orquestas nocturnas, y la excelente acogida del teatro popular de Olaitturri, que superó todas las previsiones».
A pie de calle, el espectáculo pirotécnico se llevaba igualmente muchos piropos junto al ambiente del Herri Eguna y el día de los disfraces, y la recuperación de la sokamuturras matinales infantiles. Pero también había bastante unanimidad sobre lo flojos que resultan los sanmigeles frente a los rosarios.
En cuanto al éxodo vacacional alimentado por casi una semana de fiestas, se ha notado en las calles, sobre todos los primeros días.
«La noche de San Miguel la plaza daba pena y el resto de los días también se ha notado mucho el bajón» relataban algunos. Mientras otros tenían una sensación muy distinta y aseguraban que «en general ha habido un ambiente muy bueno». En lo que todo el mundo coincidía es en que el tiempo ha acompañado y se ha convertido en un elemento clave de las fiestas. El veranillo de San Miguel no faltó a su cita y se alargó hasta los Rosarios animando a la gente a disfrutar de la calle.
D.V.