Oñati vivió el domingo un Corpus diferente por las prisas provocadas por la lluvia, pero que una tradición de cinco siglos sorprenda, tiene su mérito, y eso es lo que hizo la Cofradía del Santísimo Sacramento al llevar episodio final a la parroquia. Hace una década otro aguacero, dejó a los fieles sin la tradicional 'vuelta de San Miguel' en la plaza, y la cofradía se quedó con esa espinita, una pena que el domingo se quitaron al honrar el patrón y los dantzaris al santísimo a cubierto. Otra anécdota para la historia.
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SAN MIGUEL. Cada Corpus es distinto para sus protagonistas, y Fernando Díaz que dio vida por sexta vez a San Miguel, lo vivió intensamente. «Me he acordado mucho de mis padres, mis amigos Aitor y Enrike, mi cuñado Mikel, y de Joxe Errasti. El momento de la parroquia ha sido muy especial, diferente, me ha gustado». |
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DESPEDIDA EN LA PARROQUIA. Hay que ponerle al mal tiempo buena cara y eso es que decidieron hacer los miembros de la Cofradía del Apostolado trasladando el último episodio del autosacramental a la Parroquia, fue algo improvisado sobre la marcha, pero que los fieles agradecieron. San Miguel y los dantzaris honraron al Santísimo en el templo en presencia de todas las imágenes, cofrades y hermandades. Solo faltaron los angelitos y sus pétalos de rosa, que sí participaron en el desfile :: FOTOS MARIAN |
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PROCESION. Imágenes de las quince cofradías, miembros de la Adoración Nocturna, del Apostolado, angelitos portando pétalos de rosa, los niños comulgados este año, y la custodia del Santísimo Sacramento bajo palio, seguida de los ediles del PNV, conformaron la procesión con los apóstoles personificados y el marcial patrón San Miguel. Alrededor de ellos, los incansables dantzaris, al son de la Banda de Txistularis y la Banda Municipal, plantando cara a la lluvia por las calles alfombradas de juncos. |
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