Aficionar al canto desde la escuela
Ciento cincuenta escolares participan en el proyecto 'Ikastetxeak kantari' impulsado por Ganbara. Iosu Zubia y Miren Gurutze Plazaola coordinan las clases semanales con la pianista Araceli Guridi
16.01.13 - 00:07 - MARIAN GONZALEZ
OÑATI. Los colegios oñatiarras dan el do de pecho. Todos los centros escolares tienen ahora sus particulares embajadores de canto. Era un viejo proyecto de Ganbara Abesbatza, que ha visto la luz en vísperas de su décimo aniversario bajo el lema 'Ikastetxeak kantari', y cuenta ya con 150 ruiseñores que se vestirán de largo el próximo mes de marzo ofreciendo una actuación conjunta.
Y es que las voces infantiles han ganado protagonismo desde que en 2004 vieran la luz Ganbara Txiki y Ganbara Txikitxoak, dirigidas a jovencitos de entre 12 a 16 años y de 7 a 11 años, respectivamente. Dos años más tarde, se ponían en marcha los talleres de lenguaje musical para niños de entre tres y seis años, y en 2008 nacía Ganbara Gazte (para mayores de 16 años). Ahora Ganbara da una paso más y planta otra semillita en las escuelas con el objeto de revalorizar el canto en el marco de la oferta educativa.
En Txantxiku ikastola, que ya contaba con un coro, se han formado dos grupos por edades dirigidos por Iosu Zubia; otro en Elkar Hezi con el mismo maestro de ceremonias, y un cuarto en Errekalde Herri Eskola bajo la batuta de Miren Gurutze Plazaola. Ambos coordinan las clases semanales de una hora y están satisfechos del rendimiento de estos primeros meses.
El canto en la escuela permite adquirir dominio escénico y de expresión, socializa y difunde el folclore, y además, según los especialistas, los niños desarrollan mejor la concentración y la memoria.
Es una disciplina con mucha tradición en Euskal Herria y Ganbara ha tratado de acercarlo a las escuelas, no como una asignatura sino más bien como una alternativa lúdica.
Con la puesta en marcha del proyecto 'Ikastetxeak kantari' Ganbara es ya en una gran familia de alrededor de trescientos miembros que espera seguir creciendo pues la inscripción continúa abierta en los cuatro colegios .
No es fácil trabajar con niños, pero en Ganbara saben lo que hacen. Urko y Miren Gurutze afrontan el reto con el valor que les da sus experiencias musicales anteriores, tenacidad y mucha ilusión. Y tienen detrás a un todo terreno de la música: Aitor Biain, director de las distintas formaciones que componen Ganbara, a demás del Orfeón y las formaciones txikis bergaresas, o las colonias musicales de Tolosa.
Aitor está acostumbrado a trabajar con chavales y eso se nota. Lo esencial es la organización, la disciplina. «Con un poco de organización se puede llevar todo adelante», precisa convencido de lo que hace.
La música aporta muchas cosas, como el saber moverte en un escenario, controlar el espacio, jugar con las formas... Nuestro objetivo es hacer un trabajo serio pero de una forma divertida para que los niños se lo pasen bien pero, sobre todo, aprendan», subraya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario