jueves, 29 de noviembre de 2012

Derecho de réplica de una joven cabreada



2012 noviembre 29

por Cecilia Casado

. “La tabarra que me da mi madre con que lea un blog al que ella se ha enganchado que habla de “gente mayor” y en el que participa cada día con sus comentarios, no sé qué pretende que voy a aprender con eso, total para enterarme por persona interpuesta de cómo es, como si no la tuviera yo calada y para colmo hoy ha escrito algo muy doloroso para mí, supongo que es su opinión sincera y no pretende ponerme a parir personalmente sino a todos los jóvenes en general, pero me ha llegado al alma. Dice que somos –los jóvenes- unos parásitos que chupamos de los padres alargando los estudios años y años para no tener que enfrentarnos al mundo hostil y laboral que nos espera al otro lado…Si ella supiera, si ella supiera… pero no sabe, no puede saber, porque yo no me desahogo en ningún blog que ella pueda leer, aunque en Facebook y Twitter ya lo cuento con mis amig@s, a ver si no, nosotros también tenemos que tener nuestra válvula de escape para quejarnos y la queja está bien clara, se quejan los padres, se quejan de lo que no es más que su obra y se esconden como los avestruces la cabeza, para no ver, para no querer ver, que yo no quise preguntar nunca por qué me compraban la ropa de marca aunque sabía perfectamente que era para que “no se dijera” que su hija iba vestida peor que las demás o la gameboy que me cayó por la comunión junto a un montón de pasta que me regalaron y que me dijeron que era “para mis cosas”, fíjate con 10 años qué cosas iba a tener yo como no fuera comprarme todos los caprichos que se me antojaban, y oye que mi padre obrero y mi madre trabajadora de base, eso sí, con un coche alemán de los caros íbamos al pueblo cada año a fardar, aunque se lo curraban como locos, horas extras habrá metido mi padre por un tubo y ella se habrá teñido el pelo en la cocina con mi ayuda pero a mí siempre me compraba el “chándar” de las rayitas verticales y en verano el bikini en las tiendas de surferos y siempre orgullosa de que yo fuera guapa y postinera, que me exhibía como perrito con lacitos y a mí no me importaba, tan feliz, y qué dice que estamos todo el día con la Play si mi padre mete horas a porrillo los sábados por la tarde cuando se queda solo en casa porque mi madre se ha ido a cotillear escaparates con sus amigas que son igual que ella o peores y luego todo son quejas que si vivimos como señoritos, y eso que yo no pedía la paga pero me daban una pasta, para que “no fuera menos” cuando salía con las amigas, y claro, una se acostumbra y entre alternar y pasarlo bien luego te das cuenta de que este mundo es una mierda con la crisis y mil veces escuchado esto, de “bueno hija, tú no te preocupes que donde comen dos comen tres” y a ver así, que a mí me da lo mismo, ya les dije, yo no quiero estudiar, yo quiero ser dependienta en Zara y todo fueron gritos entonces y son también gritos ahora. Ellos no estudiaron y se quejan de que sus padres no pudieron darles estudios, pero yo creo que es la excusa porque si todo se hereda yo también he heredado de ellos las pocas ganas de estudiar, que en casa ni un triste libro que hay como no sean los que yo leo- eso sí, una tele en cada cuarto que sólo falta que pongan una colgada de la alcachofa de la ducha- así que me parece súper injusto lo que ha dicho mi madre en el blog ése de gente mayor que ella lee todos los días, que si la juventud de hoy en día no queremos estudiar ni arrimar el hombro que sólo pensamos en divertirnos y que entre botellones y porros nos estamos echando a perder, como si ellos nos hubieran enseñado otra cosa, educándome como si fuera una princesa cuando en realidad estoy más cerca de ser una mendiga porque ni tengo trabajo ni ganas de estudiar y eso de estar todo el día “echando currículums” es un rollo porque por Internet lo haces es un par de horas o menos y luego qué, menos mal que mi novio y mis amigas están también como yo y nos consolamos mutuamente porque aguantar en casa que me den la brasa con “busca algo, busca algo” cómo si fuera nuestra la culpa de la crisis, ya les digo, ELLOS los mayores son los que nos han dejado esto y encima parece que están todos amargados porque les ha tocado currar en vez de divertirse cuando han sido jóvenes, que para eso somos jóvenes…(Bueno como no lo puedo poner en el blog colgaré mi carta de protesta en Facebook. ¡Se van a enterar…!) “








En fin.



LaAlquimista



Por si alguien desea contactar:



laalquimista99@hotmail.com



.

No hay comentarios:

Publicar un comentario