¿Se puede pasar del tatami de judo a ser una de las favoritas para ganar el Ironman de Hawaii 2013?

LA BRITÁNICA ARRASÓ EN MELBOURNE CON 36 AÑOS Y CON SÓLO DOS AÑOS COMO TRIATLETA TRAS SU PASO POR EL TATAMI

Corinne Abraham, del judo a aspirante a ganar en Hawaii

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Corinne Abraham es uno de esos casos que demuestran que el ser humano cuando busca su límite puede llegar a sorprender al mundo. Esta galesa pura fibra y nervio firmó una impresionante victoria el pasado domingo en el Ironman de Melbourne. Superó en más de 16 minutos a la austriaca Yvone Van Vlerken y más de 21 minutos sobre una de las grandes de la larga distancia como la suiza Caroline Steffen.

Hasta ahí todo normal, una británica más que domina en el triatlón de distancia ironman. Tras Chrissie Wellington y Leanda Cave llega un huracán llamado Corinne Abraham. Sin embargo, la historia que riega sus piernas es sorprendente.

Esta galesa de pura cepa tiene 36 años, debutó en triatlón de larga distancia en 2010 y en poco más de dos años se ha convertido en una de las favoritas para ganar en Kona 2013. Corinne se encontró con el triatlón de casualidad. Su novio se marcó el reto de terminar un ironman en 2009 y ella, mujer de retos, decidió emularle.

 

Antes de eso, llegó a ceñirse un kimono durante años y participó en campeonatos internacionales de judo con la selección de Gales. Llego a cinturón negro y a cuando cumplió poco más de 20 años dejó los tatamis y probó en numerosos deportes. En todos destacaba pero en ninguno llegaba a brillar…hasta que descubrió el triatlón.

Corinne Abraham siente que cada día mejora y que sus 36 años no son ningún obstáculo. Ha nacido una estrella de armas tomar.